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marianouro

Viejos escritos (parte 1)

Este texto lo escribí con motivo de celebrarse el Día del Amigo en el año 2004, antes de mi tercera operación:

Escribo hoy lunes para que a los que leen el correo de noche (como los que están en otras tierras) pueda llegarles a tiempo mis humildes palabras.

Hoy no quiero caer en lugares comunes, como poemas ni tarjetas. Hoy quiero ser yo mismo. El mismo loco de siempre.

En este 20 de julio deseo agradecerles a todos ustedes el haberme permitido atreverme a considerarlos mis AMIGOS.
Quiero dar las gracias a aquellos de ustedes que me apoyaron incondicionalmente en mis "caprichos" (como suelo decirle a mis cosas), ya que sin ustedes hubiera creído que estaba obrando mal, aunque estuviera equivocado.
También quiero dar las gracias a los que NO me apoyaron, ya que me hicieron entender que debía reconsiderar mis decisiones.
Gracias a los que con sus palabras alegraron los buenos momentos y apaciguaron los malos.
Gracias a los que con su silencio me llegaron más que con tardes de consejos.
Gracias a los viejos amigos que siguen estando en esta gran aventura de la vida, y a los nuevos que me hablaron con renovadas visiones.
Gracias a los que me abrieron sus almas para que yo pudiera jugar un rato con ellas y a los que dejaron que yo pudiera despojarme de mi piel y mostrar mi interior, soportando mis gracias y mis penas.
Gracias a los (inconcientes acaso) que confiaron en mí. Y, por las dudas, perdón.
Gracias a los que están cerca para poder tocarlos, y a los que están lejos, porque me hacen extrañarlos y sus palabras me hacen sentirlos cerca.
Gracias a los que dejaron obligaciones para prestarme atención y a los que me hicieron saber que, aunque el trabajo los ahogaba, estaban de mi lado.

Porque ¿saben una cosa? Gente piola hay en todas partes. Gente agradable y sensata existe por todos lados. Pero ustedes ademas de eso, me hicieron saber que estaban de mi lado, aunque no lo estuviesen, aunque me peleasen.

Desde el último 20 de julio pasaron muchísimas cosas, y por suerte pude compartirlas con ustedes. Gracias a ustedes descubrí que ya era hora de amigarme con mi pasado, que ya era hora de arrancar, que ya eran casi diez años de ostracismo. Ahora tendrán que aguantarme cuerdo (o más loco). Lo siento por ustedes. Tiene ahora la oportunidad de huir.

Quiero que sepan que no olvido todas las gambas que me hicieron, y les imploro... no, mejor dicho, les exijo que puedan permitirme devolverles alguna porción de sus dedicaciones para conmigo.
Estoy para lo que manden, no importa lo que sea, nada es estúpido para un estúpido como yo.

Antes de despedirme, quiero agradecer, por qué no, a los que soportaron estas líneas y piensen que son una sarta de giladas. También con ustedes, pensadores discrepantes, la amistad tiene valor.

¡¡¡Feliz Día!!! Este día es de ustedes. Se lo han ganado con creces. Disfrútenlo con los que deseen. Los adoro (que pedazo de gay, dirán los muy hombrecitos).

De parte de un amigo...

_marianojavier

PD: ni con todos los loqueros del planeta van a poder librarse de mí.

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